Como médica y artista plástica, mi trabajo es un reflejo de mi profunda sensibilidad hacia el entorno, la historia y la ecología. A través de la pintura, exploro las conexiones invisibles entre las civilizaciones, la naturaleza y nuestra propia identidad.

Mis obras son un diálogo visual que busca revelar lo que a menudo pasa desapercibido: la riqueza de nuestras raíces, la sabiduría ancestral y la urgencia de nuestra responsabilidad colectiva. Me inspiro en la naturaleza, los ecosistemas y en la relación armoniosa de culturas indígenas, cuyo estilo de vida casi sin huella de carbono nos ofrece un modelo de coexistencia.

A través del óleo y el acrílico, plasmo en el lienzo la belleza y la fragilidad del mundo que habitamos. Cada pincelada es un llamado a la consciencia, una invitación a apropiarnos de nuestra historia y a forjar un futuro en el que los valores humanos y el respeto por el planeta sean nuestro destino. Mis obras son un puente entre la tradición y la modernidad, celebrando la vida, la naturaleza y la esencia de lo que somos.